domingo, 1 de abril de 2012

Atmósfera.

Cruzaré mares y océanos
para llegar a tu cielo.
Respirar la atmósfera que
repare tu lecho.
Enmudecer frente a la
acústica de un sueño...
...Que comienza a hacerse
realidad al soñar con ese
encantamiento, que vislumbran
las hora de un acercamiento,
tiniéndolas de desencuentros,
plasmados en hechos que no
ocurrieron que quedan tan sólo
en los anhelos de sentires fugaces
que no cura el tiempo, que con el
descanso se intenta volverlos ciertos,
que se acuñan en cientos de
pensamientos que aprietan fuerte
y estremecen el pecho,
inquietante silenciado en el sonido
que emanan de poros abiertos que
intentan sellarse frente al desprendimiento
de lo incurable que pertenece a un
amor en concierto.




Sustancia encadenada.


LLorán nuevamente con
un paroxismo de parnaso
las letras escritas alrededor
del papel, no quieren ellas
decir el entorno a sentir
dejando entrever que todo
sucede así sin pensarlo,
no medido no armado
sin presentir que lo
que está quedando
aconteció allí en ese
instante irremediable
del subsistir envainando
la sustancia misma
del elixir que mueve
en girones el hoy,
el ayer y el revivir
que cada molécula
intenta en el devenir
volverse vida para no
ser inanimada en sí,
modificando las leyes
del existir de un ente oculto
que pretende revivir.