sábado, 21 de abril de 2012

Amalgama.

Noche oscura
sin luna, sangre
corriendo
derramándose.
Desangrándose ella
al ocaso del día,
agonizante estela
de vida sin luz.
¿Acaso la ha visto alguién?
No.
Ella amalgamada
al espanto de un
amor_odio,
que la dejó desangrando.
Amordazando al silencio,
arterias abiertas, al asesinato,
que tendió en las aceras,
los coágulos.


Cables y señales.


Una voz que resuena
como desde las entrañas
mismas, se reconoce.
Repica fuertemente
a la oreja que trata
nuevamente de sentirla.
Pacificadora del adentro
sumergido, capaz de tiznar
el encantamiento y el cautivo.
Cuantificadora en
sonido, trasmutando
cables, señales y
hermistigios, cuan
cercana es, la he oido
dejando de ser imágen
congelada pasó a ser
carne en mis oidos.