sábado, 3 de diciembre de 2011

La fuente.

Los labios resecos
el ansia
cuando sorba
el agua de mis
manos te vi...
A través de
la cascada
que por boca
del ángel surgía.
Seguí bebiendo
de esa imagen
nueva, increible.
Bebía en tus ojos,
de tus labios.
Rodeé la fuente
y allí estabas
aguardándome.
No sé si fueron
horas,minutos,
la eternidad.
Eras tú
debí parecerte
una alusinación
quería hablar.
Comprendiste
habías bebido
de la misma fuente.